Después de dos meses.

¿Sabes lo que es tratar de andar en bicicleta después de varios años de no pedalear nada?Eso me pasó ayer en karate. Por lo regular la sensación de estar fuera de lugar desaparece después de algunos minutos, pero de plano ayer no sucedió el milagro. Mi nivel de azúcar bajó drásticamente a la media hora de haber iniciado, mi respiración apenas estuvo bajo control, por no decir de mi presión arterial que ha de haber estado por las nubes en esos momentos. Lo bueno de todo esto es que como sé controlar esa energía, no tengo problemas en recuperarme de esos embates de la naturaleza.

Otra cosa de la que me percaté fue de que tenemos dos nuevos alumnos sen el dojo. Quizá solo sea la percepción alterada de no haber pisado el terreno en tiempo considerable, pero todos los que estaban conmigo antes han adquirido un control, fuerza y técnica sorprendente. Claro que la han adquirido, pero el desbalance de poderes fue tremendo para mi ya que mi cada vez más abultado abdomen me impedía seguir apropiadamente el paso a mis compañeros. No fue sino hasta el final de la clase que me percaté del aumento de peso en este periodo de inactividad física. Por supuesto, también he comido como loco desde el principio del semestre. subí cuatro kilos y medio y mi cintura otros nueve centímetros más. Y todavía me sorprendo de mi rendimiento pobre.

Por otro lado, tuvimos combate y me tocó pelear contra Oscar Arood y el Vincent, al primero que es el avanzado de la clase no lo pude ni tocar, ya se hizo una máquina de pelea bastante ágil  y poderosa y al segundo, bueno, tiene menos tiempo que yo y con una complexión un poco mas rígida que la mía (actualmente), fue un combate parejo, le gane por un punto. Claro, le debo la revancha.

Como sea, fue un día para recordarme que la falta de entrenamiento cobra sus altas tasas de interés sin importarle nada. Lo mismo va para cada actividad a la que nos dediquemos, como al dibujo, pero eso es material para otra entrada, adiós.

La la bu babába la la south park uh lalalá

Nada mas por gastar bytes del ciberuniverso, no más quiero decir que la parodia de Pokerface en South Park está buenisima. Toma esa Lady Gaga.